Consejos y trucos para ahorrar en el consumo de gasolina

Vamos a ver una serie de consejos sobre conducción, mantenimiento mecánico y buenas prácticas para evitar sorpresas desagradables al reducir el consumo de combustible en nuestros vehículos y además cuidar la mecánica.

Los milagros no existen. Así de claro y conciso. Los vehículos necesitan combustible para moverse y no esperes encontrar una fórmula secreta que te permita ahorrar la mitad del carburante que usas habitualmente.

Los consejos que verás aquí tienen como principal objetivo evitar sustos por exceso de consumo y problemas con la mecánica, pero no esperes variaciones de más de un 5-10% dependiendo del tipo de conducción y el modelo de vehículo que tengas.

Es muy importante señalar que debemos llevar la medida de ruedas, la presión de inflado, el aceite del motor y el tipo de gasolina que el fabricante ha establecido para nuestro modelo. Ninguno de los trucos que verás aquí te pedirá que modifiques las características de fábrica.

En primer lugar vamos a hacer un repaso de varios «apaños» que hacen más mal que bien a nuestro vehículo, y seguido hablaremos de los consejos que podemos poner en práctica para mejorar nuestra conducción.

Cosas que no debemos hacer

Hay algunos «trucos» que se han ido transmitiendo entre la gente para ahorrar carburante, y que perjudican seriamente la seguridad de quienes los aplican poniendo en peligro sus vidas y las de las personas que les rodean.

Inflar las ruedas más de lo recomendado

Si aumentamos la presión a la que inflamos nuestros neumáticos tendrán menor fricción con el suelo y por tanto se consumirá menos combustible.

Esto es cierto, pero las consecuencias de tener menor superficie de la cubierta en contacto con el suelo es que se pierde agarre y maniobrabilidad, que nos puede llevar a tener un accidente si nos enfrentamos a una maniobra brusca o un frenazo repentino.

Por otro lado este sobre inflado también aumenta las posibilidades de que el neumático explote en un bache o un pinchazo.

Usar ruedas más pequeñas.

Este punto se basa en el mismo principio que el anterior. Algunos dicen que hay que usar cubiertas con una medida inferior a la recomendada para reducir la fricción con el suelo.

Las consecuencias son las mismas. Pérdida de agarre y control sobre el coche. De esta forma aumenta el peligro en la conducción.

Seguir el rebufo

Todos sabemos que hay gente que se cree que podría competir con Fernando Alonso en Fórmula 1. Incluso algunas personas aplican a su forma de conducir las mismas estrategias que se usan en las carreras, y una de ellas es ponerse lo más pegado posible al vehículo que tienen delante para aprovechar su rebufo y reducir la energía que necesita su vehículo para moverse.

Aunque esto funciona, así no se puede guardar la distancia de seguridad que necesitamos para poder reaccionar a tiempo en caso de emergencia. Un frenazo del vehículo siguiente y se estrellarán irremediablemente con ellos.

Consejos que funcionan

Los motores actualmente están muy bien optimizados para ahorrar gasolina el consumo, por lo que como hemos señalado al principio, no podemos esperar trucos mágicos que ahorran la mitad de nuestro consumo.

Aun así hay buenas prácticas que podemos hacer para mantener nuestro coche al día y gastar el combustible justo y necesario en nuestros desplazamientos.

Aparcar rápido

El primer consejos que daremos hoy es el mas importante y no tiene nada que ver con la mecánica sino con nuestras costumbres. Muchos somos los que siempre queremos aparcar en la puerta y damos vueltas y vueltas sin lograr encontrar sitio.

Si sumáramos toda la gasolina que hemos derrochado de esa forma nos llevaríamos un susto muy serio. Es una de las peores formas de gastar tiempo y dinero de la forma más inútil.

El mejor consejo que puedes llevarte hoy de aquí es el siguiente.

«Es mejor andar 5 minutos que pasar 20 buscando sitio

Además es muy probable que después de esos 20 minutos acabes aparcando a 5 minutos andando de tu destino.

Sacar el aire caliente del coche

En verano es muy habitual tener que aparcar el coche al sol durante varias horas y cuando lo vamos a coger esté ardiendo y tenemos que poner el aire acondicionado un buen rato. Hay una forma más eficiente de actuar en este tipo de ocasiones.

La idea es bajar la ventanilla del conductor (mantener todas las demás subidas) y abrir y cerrar varias veces la puerta del copiloto para hacer efecto arrastre con el aire del interior y que entre aire de fuera por la ventanilla del conductor.

De esta forma sacaremos el aire recalentado del interior del coche reduciendo en 8-10 grados la temperatura interior y podremos entrar sin ahogarnos de calor.

En el siguiente vídeo podéis ver un ejemplo práctico del proceso. (Disculpad la calidad de la imagen).

YouTube video

Llantas y neumáticos

Tener la llanta y la cubierta de las medidas que establece el fabricante para nuestro modelo suele ser lo más eficiente para el consumo. Una cubierta mal inflada puede generar un consumo extra en nuestro coche y crear problemas de seguridad por perder agarre.

Si vamos a poner una llanta de un tamaño mayor y con un neumático más ancho, debemos saber que el coche ganará en agarre y mejorará la maniobrabilidad pero aumentará el consumo de energía para moverse.

Ya es cuestión de cada uno valorar la estética, seguridad y consumo para decidir qué tipo de ruedas pone a su vehículo.

Es aconsejable tener un manómetro para revisar periódicamente el estado de nuestros neumáticos por que los de las gasolineras en algunas ocasiones no ofrecen mediciones fiables. De paso también podemos quedar como unos profesionales con la gente de nuestro entorno al tener herramienta de este tipo en nuestro vehículo.

Mantenimiento del vehículo

Un coche con filtros del aire o de la gasolina obstruidos, unas bujías con problemas o un aceite de motor con más kms de los que debería, es una fuente inagotable de problemas y el consumo excesivo es el menor de todos.

Un coche sin el mantenimiento al día puede ocasionar una avería cuyo importe multiplique varias veces el coste del mantenimiento y el del combustible.

Ventanillas y aire acondicionado

¿Ventanillas arriba o ventanillas abajo? Una de las principales fuentes de debate sobre el consumo de gasolina.

Si estamos conduciendo por ciudad (y especialmente con las nuevas normas de 30 kmh) la velocidad es reducida por lo que el efecto arrastre que sufrirá nuestro coche por tener las ventanillas abiertas será inferior al gasto de combustible por poner el aire acondicionado.

Sin embargo cuando salimos a carreteras interurbanas donde la velocidad sea superior a 50 Kmh, la resistencia aerodinámica que ofrece el automóvil por la entrada de aire será mucho mayor, así que ahí merece más la pena tener las ventanillas subidas y poner el aire acondicionado en marcha.

APPs de tráfico

Un atasco es una de las peores experiencias que se puede tener al volante de un coche. No sólo estamos perdiendo nuestro valioso tiempo sino que el gasto en combustible es mayor.

Para evitar caer en un embotellamiento fruto de un accidente, unas obras o cualquier otra eventualidad, es recomendable usar APPs que monitoricen el tráfico y nos avisen de por donde no debemos ir.

Aerodinámica

Cuanto menos resistencia aerodinámica pongamos al coche, mejor rendimiento tendrá en la carretera haremos más kilómetros.

Tener las ruedas bien alineadas no sólo evitará gasto extra de carburante sino que también evitaremos desgaste excesivo de las cubiertas.

No debemos quitar piezas del vehículo, especialmente del frontal, que no nos parezcan estéticas. Están ahí por algo.

Y si vamos a necesitar una baca o un portabicicletas, debemos usarlo sólo cuando sea necesario y quitarlo cuando hayamos acabado. Es una de los accesorios que más resistencia al aire añade a nuestro vehículo.

Conducción eficiente

Este es uno de los puntos más importantes. Según sea nuestro estilo de conducción gastaremos poco o mucho combustible. Algunos consejos para reducir este consumo son:

RPM

No subir de vueltas del motor de forma innecesaria. No salir con acelerones y hacer los cambios de marchas en torno a las 2.500 Revoluciones por minuto.

Freno motor

En conducción urbana hay que intentar prever las condiciones de la circulación. La idea es no acelerar mucho para no tener que frenar mucho y usar el freno motor lo más posible. Esto se utiliza con el punto anterior para hacer una conducción eficiente. Algunas personas lo verán como una conducción aburrida, pero eso no es objeto de este artículo.

Velocidad constante

Los puntos anteriores se aplican a las salidas y paradas cada vez que detenemos el vehículo. También se pueden aplicar cuando realizamos un trayecto largo tanto autopista.

No dar acelerones ni hacer maniobras bruscas. Cuando estemos en una cuesta bajaremos 10-15 kmh la velocidad para no forzar el consumo ya que entre 100 y 120 kmh puede llegar a haber una diferencia del 20% de consumo dependiendo del vehículo que sea. Usaremos el control de velocidad de crucero si lo vemos oportuno

La mejor forma de entender cómo debemos pisar los pedales para no derrochar gasolina en nuestros trayectos es pensar que en cada pedal hay un huevo y si le pisamos con ganas lo romperemos.